Visitaban Moratalaz dos de los referentes de la marcha española en los últimos tiempos. En categoría femenina, María Vasco, se impuso a la jóven Takacs a la que aventajó en tres segundos, recorriendo en 21:51 segundos los cinco kilómetros de que constó la prueba. Venía la barcelonesa de ganar en la Copa del Mundo en Méjico y demostró que su estado de forma era un punto superior a su rival.

Ausente Paquillo Fernández, envuelto presuntamente en una trama de dopaje, el estandarte de la categoría masculina fue Jesús Ángel García Bragado que, a sus 41 años, es el atleta español con más participaciones en unos Juegos Olímpicos.

Desde Barcelona ‘92 el marchador madrileño no se ha perdido ni una cita de la élite olímpica. Es impresionante comprobar la competitividad y capacidad atlética de Bragado que, aunque ha fijado su retirada para el Europeo de Barcelona este mismo año, no sería de extrañar que alargase su carrera hasta Londres 2012.

Sin embargo, la ardiente lengua de asfalto en que se convirtió el circuito urbano de Moratalaz deparó un final inesperado. El murciano David Domínguez, especialista en la distancia de 20 kilómetros, acabó imponiendo su velocidad y, en un ajustado final, cruzó los 10 kilómteros de recorrido a los 42 minutos y 12 segundos de la salida.

Dos emocionantes carreras en las que además, Miguel Ángel Prieto (olímpico en Barcelona 92) batió el récord de España de la distancia para mayores de 45 años con un tiempo final de 46 minutos y 53 segundos.